lunes, 9 de agosto de 2010

Atrápalo, que puedes... la historia de Frank Abagnale Junior

Cuando fue 'piloto' de PanAm
Frank Abagnale Junior tuvo un par de padres especiales como lo fue su propia vida en una edad en que la mayoría se dedica a hacer algún deporte, mirar TV, escuchar música y tratar de conquistar chicas.
Él nació en 1948 y su padre formó parte del ejército liberador norteamericano que llegó a Francia a finales de la II Guerra Mundial. En un pueblito perdido galo 200 de estos muchachos observaron bailar a una bellísima campesina. Los 200 quisieron tener el amor de esa muchacha. Sólo el padre de Frank lo logró. Tres años después nacía el protagonista de una historia increíble.
Frank Junior se las ingenió para hacerse pasar por piloto de PanAm (copiloto, en rigor), médico de un hospital y abogado que trabajó en la oficina del Fiscal de Lousiana… ¡antes de los 18 años!
Para los que piensan en el realismo mágico como un sino de Sudamérica sólo les pido que se tomen dos horas y 20 minutos para ver Atrápame si puedes, la notable película de Steven Spielberg donde se reconstruye buena parte de esos intensos años de vida de uno de los mayores falsificadores que tuvo EEUU y que llegó a vaciar las cuentas no sólo en su país de origen sino en un puñado de naciones europeas.
Cuando vuelve deportado desde Suiza a su país como preso logra una fuga desde el avión que lo trae de manera notable (eso se ve en la película).
¿De qué fue capaz? Resumamos. Simuló –con mucho éxito- ser piloto de PanAm, TWA, Air France; ser médico de la UCLA y fue jefe de residentes en un hospital, simuló ser doctor de Sociología y enseñó un semestre en la universidad de Utah y ser abogado de Harvard.
Los actores –así como Spielberg, un director que nunca me defraudó cada vez que me senté ante una pantalla a ver algo que salía de sus manos- están sensacionales. Un Leo Di Caprio que se luce hasta el extremo con su Frank Junior así como un Tom Hanks como el agente del FBI que quiere capturarlo.
Tirar más datos puede resultar un virtual “spoiler” de lo que contiene la película.
Sólo resta agregar que Frank Jr vive hoy y que “se pasó al lado de los buenos” pero que esto no figura básicamente en la película.
Atrápame si puedes constituye una de esas pequeñas maravillas: la vida de una persona (o de dos, según se mire) puede transformarse en una pequeña obra de arte, o de al menos, una orfebrería fina trabajada con el cincel de un maravilloso realizador que supo plasmar el arte del siglo XX: Steven Spielberg.

No hay comentarios:

Publicar un comentario